La cerámica es un arte destinado a crear productos funcionales y duraderos. Además es una de las mejores maneras de darle forma y sentido a las ideas. Manejar el barro, darle forma y convertirlo en un objeto permite desarrollar la capacidad creativa de cada uno. Por ello, si te apasiona la cerámica artesanal, no te pierdas los consejos que te dejamos a continuación para poder crear tus propias obras en casa. Además, recuerda que puedes dar un paso más en este ámbito de estudios con nuestro máster en cerámica artesana.
Índice de contenidos
¿Qué materiales se necesitan en cerámica artesanal?
La cerámica se ha convertido en un gran hobby en los últimos años, ya que aparte de ayudarnos a ser más creativos, cuando la obra está terminada, la satisfacción es enorme. Además es un arte que pueden practicar desde los más pequeños, hasta los más grandes. Asimismo, no necesitas una gran inversión para crear grandes objetos. A continuación, vamos a ver cuáles son los materiales básicos que necesitarás para iniciarte en la cerámica artesanal. Recuerda que, aunque existen muchos materiales específicamente diseñados para la cerámica, la mayoría son sustituibles por otros que tengas por casa.
Arcilla o el barro
Existen diferentes tipos en el mercado: loza, gres, porcelana o porcelana de baja temperatura. También depende mucho de lo que vayamos a querer crear. Los materiales resistentes suelen ser horneados para poderles dar uso sin miedo a que se dañen o se deshagan al mojarlos, por ejemplo. Sin embargo no todo el mundo tiene acceso a un horno de cerámica.
Por regla general, el barro de cocción se divide en aquel que es de baja temperatura (950ºC a 1100ºC) y el que es de alta temperatura (1200ºC a 1280ºC). Cada uno tiene diversas texturas y colores. También existen arcillas para hacer cerámica artesanal de secado al aire. Son más frágiles, pero no necesitan ser horneadas, por lo que si no tienes acceso a un horno, sin duda te recomendamos que apuestes por esta opción.
Herramientas
En cuanto a las herramientas, podemos distinguir varios tipos:
– Las estecas, que se utilizan para modelar y pueden encontrarse de metal, madera y plástico.
– El punzón, que puede sustituirse por una aguja o alfiler, sirve para pinchar.
– Los pinceles, que se utilizan para trabajar el barro y los esmaltes. Suele estropearse con el uso y no es necesario que sean especiales para cerámica, por lo que puedes utilizar cualquiera.
– El cortador de alambre, que puedes sustituir por hilo, sirve para cortar el trozo grande de barro en las pequeñas piezas con las que vayas a trabajar.
– La puncheta, que se puede sustituir por un cúter, sirve para cortar el barro sobrante con delicadeza.
– El vaciador, que sirve para hacer ajustes en cuencos o bowls.
– El riñón, que sirve para alisar el barro y remover la mayoría de imperfecciones.
– Un cuenco con agua, para humedecer el barro.
– Un rodillo, da igual si es el de cocina, que se utiliza para aplanar el barro.
– Palos de madera para medir el grosor del barro (suelen tener 5mm de grosor).
– Materiales para hacer texturas, como pueden ser rejillas, hojas de plantas, telas o cualquier otra cosa que tengas por casa.
– Tela plastificada, para proteger tu superficie de trabajo
– Moldes de escayola, en caso de que quieras utilizar moldes.
Recuerda que no todas estas herramientas son necesarias, pero la mayoría te ayudarán a que el trabajo sea más sencillo.
Pinturas, esmaltes y barnices
Una vez moldeada la pieza, si es de secado al aire, se debe dejar secar y posteriormente puedes pasar a la pintura acrílica, para darle color. Una vez seca la pieza, puedes darle una capa de barniz específico para barro de secado al aire que lo protegerá un poco más. Puedes encontrarlo mate o con brillo.
Por otro lado si la pieza va a hornearse, debe esmaltarse. Los esmaltes le aportarán un brillo que hará relucir la pieza. También pueden usarse engobes o rotuladores especiales.
Pasos para hacer cerámica artesanal
- Lo primero que debes hacer es amasar el barro para que se mezcle bien y sea algo más elástico. Esto te ayudará a trabajarlo mejor. Utiliza hilo para extraer un trozo de barro del bloque que tengas y comienza a amasarlo.
- Una vez amasado el barro, extiéndelo con la ayuda de un rodillo para conseguir que tenga un grosor homogéneo. Recuerda que es recomendable que tenga unos 5mm de grosor.
- Comienza a darle forma, según la pieza que quieras crear. Puedes utilizar cuencos, platos y tazas que tengas por casa como molde, te ayudarán a que quede simétrica la pieza.
- Una vez finalizada la pieza, deja que seque. En caso de tener que ser horneada, deberás llevarla a cocer. Las temperaturas utilizadas suelen estar entre los 980ºC y 1020ºC.
- Una vez secas y/o horneadas, estarán listas para pintar y decorar. Recuerda que la horneada debe someterse de nuevo a un proceso de cocción para que tome su color y características definitivas.
- Por último, deja secar y/o enfriar y ¡disfruta de tus piezas artesanales de cerámica!